Cómo hacer una manicura a la francesa en casa
Con algunos elementos y esta guía podrás hacer una manicura a la francesa en la comodidad de tu hogar.
Haz tú misma la manicura francesa
La manicura francesa es en verdad una belleza. Es limpia, es prolija, y hace realzar la belleza de las manos con una simple coloración. Seguro que las manicuras profesionales tienen mucha experiencia y hacen trabajos estupendos, pero podemos, con algo de práctica, dominar esta técnica en la comodidad de nuestra propia casa, y estar así prevenidas para dejar nuestras manos divinas en cualquier momento.
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Elementos necesarios
Para hacer la manicura francesa vamos a necesitar barniz de uñas color blanco (de preferencia, un off white o blanco hueso, es decir: lo que podríamos definir como "un blanco no tan blanco"). Y un barniz de uñas translúcido o transparente, un brillo. Podemos utilizar otros productos, como fortificadores líquidos. Necesitás tener a mano cinta de papel, cinta de carrocero, o bien las tiritas para manicura francesa que se venden en los mercados, farmacias y catálogos. También debés tener a mano todo tu kit de manicura: cortacutículas, el palito de naranjo, removedor de esmalte y todo lo que utilizás regularmente para hacerte las manos.
Procedimiento para hacer manicura a la francesa
Comenzamos por remover el esmalte viejo con quitaesmalte y algodón, cuidadosamente. Luego lavamos bien nuestras manos con agua tibia y jabón, para eliminar cualquier resto de removedor (que luego podría afectar el acabado final del tratamiento) y para ablandar un poco la piel de los dedos. Ya lavadas y secas las manos, arreglamos todos los detalles que encontremos: embellecemos las cutículas, eliminamos excedentes de piel y pellejitos, cortamos y limamos donde haga falta (para que lo crecidos de todas las uñas tenga la misma forma y tamaño, que no sea demasiado largo), y las dejamos bien lindas y listas para comenzar.
Si utilizás productos fortificadores, este es el momento de hacerlo. Luego de que haya secado, comenzamos por cortar tiritas curvas de cinta adhesiva de bajo contacto (la de papel es especial, pero si conseguís las tiritas de manicura francesa, mejor). Aplicás estas tiras sobre las uñas, dejando libre la parte crecida de las mismas, y procurando que la cinta quede bien adherida y apenas hacia dentro de la uña, para que luego, al crecer, no quede visible la parte crecida sin colorear.
"La manicura francesa es limpia, es prolija, y hace realzar la belleza de las manos con una simple coloración."
Sobre esta parte libre, aplicamos una capa fina de esmalte blanco. Dejamos un minuto y retiramos las cintas, y dejamos que el barniz blanco seque por completo. Luego aplicamos una o dos capas de esmalte transparente como de costumbre, y dejamos secar bien.
Cuando ya esté bien seco el esmalte, puedes ponerte alguna crema humectante y nutritiva de manos, y vas a ver que en pocos minutos conseguiste hacer de tus manos una verdadera belleza como si recién salieras de un salón exclusivo.
