Cómo proteger nuestros ojos con gafas de sol

Por todo ello, es necesario protegerlos adecuadamente, especialmente de las radiaciones solares, para evitar enfermedades tan problemáticas como la degeneración macular, la conjuntivitis o incluso unas cataratas prematuras.

Las gafas de sol nos pueden proporcionar esa protección que tanto necesitamos para nuestros ojos, por ello, es fundamental que seamos cuidadosos a la hora de la elección de nuestras gafas, pues unos lentes que no presenten los niveles de calidad exigidos pueden repercutir en daños que, en ocasiones, pueden ser irreparables.

"Cuando compremos unas gafas de sol, lo primero en lo que tenemos que prestar atención es en su grado de protección."

Consejos al comprar gafas de sol

Cuando tenemos pensado comprar unas gafas de sol, lo primero en lo que tenemos que prestar atención es en su grado de protección. La mejor forma de obtener esta información es acudiendo a tiendas y centros especializados en gafas de sol como la cadena Roberto Martín, donde nos ofrecen un asesoramiento profesional para basar nuestra compra en las necesidades que vayamos a tener.

Lo primero que nos mostrarán es el sello CE, que consiste en un marcado de la Unión Europea para verificar la calidad de todos aquellos productos que van a pasar a ser comercializados en su territorio.

A continuación, nos aconsejarán sobre el filtro de protección más recomendable en función de para qué queramos nuestras gafas. Los filtros se aplican a los cristales y varían en una escala del 0 al 4, de menor a mayor protección. Igualmente, nos fijaremos en cómo han sido tratados estos cristales, ya que pueden ser polarizados, fotocromáticos, espejeados o antirreflejo. Cada uno de estos tipos de tratamiento tienen una función distinta, así, los espejeados son indicados para la práctica de deportes en la nieve y de alta montaña, o los fotocromáticos para cuando vamos a ir pasando entre ambientes con distinta luminosidad de modo que cambian progresivamente su tintado.